Los ajustadores de seguros trabajan para la aseguradora y no para ti. Están obligados a velar por el mejor interés de su empleador, no por el tuyo y pueden usar cualquier información que proporciones en tu contra para poder así reducir la cantidad de compensación a la cual tienes derecho.
Después de un accidente, hay ciertas declaraciones que deben evitarse al hablar con un ajustador de seguros para garantizar el mejor resultado posible.
Nunca digas que no estás lesionado
Si no experimentas ningún dolor o molestia inmediatamente después del evento, es importante hacer un chequeo de todas formas. El no sentir dolor no significa que no haya lesiones, ya que el dolor u otros síntomas pueden tardar en aparecer.
Al tratar con ajustadores de seguros, es esencial evitar decir que no estás lesionado. Ten en cuenta que esta declaración podría usarse en tu contra más adelante, lo que posiblemente termine siendo perjudicial para tu caso.
Es mejor hacerle saber al ajustador que no estás seguro del alcance de tus lesiones en este momento y que proporcionará actualizaciones.
No admitas la culpa
Nunca debes decirle al ajustador de seguros que tuviste la culpa del accidente.
No admitas ninguna responsabilidad por el incidente, ya que esto podría conducir a un acuerdo menor o incluso hacer que tu reclamo sea rechazado.
Se cauteloso al describir tus lesiones
Lamentablemente, estos datos se pueden utilizar de forma malintencionada por parte de la compañía de seguros, lo que puede resultar en una cantidad de reclamo reducida o incluso en la desestimación de tu caso.
No especules sobre el accidente
Buscar una respuesta rápida para explicar el incidente puede parecer algo lógico, pero es posible que, sin saberlo, impliques o acuses falsamente al otro conductor. Esto puede hacer que la solución de problemas sea un desafío.
Al momento de entrevistarse con un ajustador de seguros, es recomendable presentar solo información que puedas confirmar enfáticamente.
No permitas que te graben
Si bien puede parecer inofensivo o incluso útil permitir que el experto grabe su conversación, nunca es aconsejable hacerlo. Tus palabras podrían malinterpretarse o sacarse de contexto fácilmente, lo que podría dar lugar a posibles malentendidos.
Es mejor utilizar el correo electrónico para la comunicación en lugar de otros medios, ya que le proporcionará un registro cronológico de todas sus conversaciones.